jueves, 9 de agosto de 2012

Fuimos "nosotros" por un rato


Se me hace difícil respirar, sabiendo que conmigo ya no vas a estar. Me duele ver y tener que aceptar, que nuestra historia llegó a su final. Pero de eso se trata esto, cada inicio tiene su fin. Nadie dijo que la realidad sería un arco iris, que el amor sería eterno.

Aunque todas las mañanas pensando en ti me levantaba, aceptar estar sola era lo que me quedaba. En mi mano una taza de café por las tardes, era la que me acompañaba. Y en las noches no me quedaba más, que mis lágrimas con la almohada secar. El viento me susurraba que era hora de cambiar, que el pasado hay que dejarlo atrás y otro camino tomar.

Con palabras no puedo expresar lo que me hiciste sentir, aun no estando conmigo me hiciste feliz. El valor que te di, no lo diste tú por mí. La importancia que te di, no me la diste tú a mí. Lo que tú odiaste de ti, fue lo que me enamoró a mí. Pero una también se cansa de esperar, una se cansa de que la ilusionen. Una persona se cansa de que le mientan una y otra y otra vez. Una se cansa de arriesgar todo por alguien, por alguien que no te quiere de la misma forma que tu a ella. Y por último... Una persona se cansa de esperar por alguien que no le ha demostrado nada, a pesar de que esa persona por cierto tiempo la haya hecho feliz, aun con palabras.

miércoles, 1 de agosto de 2012

Jessie


       Ella era Jessie, la típica chica que estaba en boca de todos. La que quería ser querida por todos, pero sobretodo ser amada por un hombre. Ella era aislada y sin embargo se le veía feliz, pero era todo lo contrario. Su vida era una montaña rusa de problemas, verdades y desamores ... Aceptó los primeros, ignoró las segundas y olvidó los terceros. Pero ella tenía otro problema, no estaba de acuerdo con su cuerpo... 


  
     Vivía la mayor parte acomplejada, por el qué dirán de ella. Por otra parte, tenía sueños, metas que cumplir, pero muchas personas no estaban de acuerdo con ella. Quería darse a conocer, pero de buena forma. Ella quería ser aceptada, por las personas que a ella le interesaban, quería que la trataran como a una persona más. Un día Jessie se enamoró de alguien, de alguien que no la quiso de la misma manera; de esto surgió que ella diera un cambio radical. Ella no quería saber nada del mundo, estaba muerta en vida, hasta que un día se dio cuenta de que no es necesario tener a alguien para ser feliz. Se dio a conocer como realmente era ella, creyó en ella misma, se sintió segura de lo que estaba haciendo. Jessie soltó su veneno, empezó a creer y confiar... Ella simplemente, descubrió quien era.